Actualmente se le denomina también “Amistad cama adentro” o “Amistad con cover”; aunque en la amistad con ventaja rara vez se es bien amigo. Casi toda la relación se sostiene en el sexo. No hay que engañarse. No hay más ciencia. El amigo con ventaja ha sido alguien ha quien toleramos fundamentalmente en la cama y claro, en uno que otro desayuno, compartiendo una película; tiene también sus límites naturales. Si surge más entusiasmo del adecuado, ya no sería ventaja ni amistad sino algo parecido al amor, esa mitología que da sus frutos a unos pasos del hacha (Lihn)

Los amigos con ventaja se visitan, se encuentran en alguna parte, se dan citas en cines, salen a  bailar, cualquier distracción va a dar el 99% de las veces a una cama. Es el remedio perfecto para aquell@s con alergia a las relaciones, una práctica social que utilizada inteligentemente puede llegar a reducir de manera considerable los niveles de neurosis en quienes la utilizan, ya que se tiene sexo pero sin la presión de un compromiso.

La amistad con ventaja depende también sustancialmente de preservativos, buen sexo (no se necesita sólo sexo) y una dosis precisa de distancia y desencuentro. La gran clave de todo esto es saber detectar el momento exacto en que ese aroma se queda y llega con uno hasta la casa o el trabajo, cuando las manos comienzan a quedar más tiempo tomadas y el desayuno se alarga tranquilo sin importar lo demás. Para evitar este tipo de “incovenientes” se recomienda algo así como besar siempre con los ojos abiertos, sacarse el corazón y ponerse una piedra en el pecho (Buarque), porque rara vez sabremos gran cosa de nuestras amistades con ventaja que no sea el color de su ropa interior o el nuevo número de celular. No necesitan responder ni preguntar nada. Imposible pensar en paseos por la playa, encuentros familiares, algún viaje a futuro, niños corriendo por el comedor de una casa. Cualquier idea similar echará por tierra toda pretensión por alcanzar una relación con ventaja. Se quedará usted sin amigo ni ventaja, y lo que es peor, totalmente solo.

Otra posibilidad de final, ahora de índole “optimista”: Sacarse el corazón y ponerse una piedra en el pecho pero dejar el corazón cerquita, por si acaso.

Imagen: Internet
Inicio | Sobre Luces y Sombras | Sobre el Autor | Cómo navegar por el sitio | Ultimas Fotografías | Indice de Fotografías
Inicio | Sobre Luces y Sombras | Sobre el Autor | Cómo navegar por el sitio | Ultimas Fotografías | Indice de Fotografías
Licencia Creative Commons